Poesía

Poesía

sábado, 18 de mayo de 2013

Tormenta de cura


Sus creencias la llevaron a falsos
Dioses a adorar, y a predicar su
Fanatismo rezagando a un lado
La cordura y el amor de encontrarse
El libertad.

Esparce sus prejuicios al infinito
Llegando a sus amados a apartar,
Quedando sola y sus miedos del
Más allá se imponen dentro de
Su consciencia a dormitar… Al
Alba, tiembla Roma imperial:
Sin cordura en la altura, y pan
Y circo a quienes al imperator
Se sumían a acatar su voluntad.

¡Oh tú que cubres la luz del sol
con neblina! ¡Infelicidad pura,
dejad de esparcir tu amargura!

¿No ves el daño que a tu familia
miserablemente infliges con tu
ego y prejuicios de cura?

Mis versos son un desfogue a la
Impiedad que derrama la sangre
De mi lengua mordida. Callar, callar,
Siempre callar, y tú, pensando que
Todo esta en paz…